Una denuncia de los vecinos de la comuna de Graneros, fue lo que alertó a las autoridades, quienes pudieron identificar una emanación de gases tóxicos que puede causar problemas para la salud de ese sector.

Fue la llamada de un vecino a bomberos lo que catapultó todo un protocolo de seguridad y que ahora tiene a la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medio Ambiente, indagando las razones de este posible delito, indicó el Comisario Héctor Chaura.

Por fortuna, no habría personas afectadas por esta emanación de  gases tóxicos, sin embargo, la Policía de Investigaciones, revisó el estado de los niños de un jardín infantil que se encuentra en el sector cercano a la propagación de estos gases.

El detective agregó que se está investigando el delito de propagación de sustancias químicas que pongan en riesgo la salud de las personas o el medio ambiente.

Según se informa, el hecho ocurrió entre las calles Valparaíso y la Ruta H-10 y el origen de esta emanación está en proceso investigativo, por ello se realizan pesquisas apoyadas por el Laboratorio de Criminalista Regional Rancagua de la PDI, que busca establecer de dónde provienen los gases nocivos y la causa de los mismos.

Por su parte, el equipo HAZMAT de Bomberos de Rancagua, realizó mediciones de los gases en distintos puntos del canal que recorre desde calle Valparaíso hasta la intersección con la Ruta H10, que une Graneros con Rancagua.

Por su parte el fiscalizador Víctor Peña, de la Seremi de Salud VI Región, indicó que al llegar al lugar se detectó ácido sulfhídrico en altas concentraciones, el cual se produce por la descomposición de material orgánico, y es altamente toxico y explosivo. Hasta el momento, no tenemos notificaciones de personas que hayan llegado hasta el hospital con alguna sintomatología producto de esta contaminación”, puntualizó la autoridad sanitaria.