El Senado aprobó en particular y despachó a tercer trámite constitucional la Ley de Migración y Extranjería.
Allí, las modificaciones a la iniciativa deberán ser aprobadas o rechazadas. En caso de que ocurra lo primero, el proyecto quedará en condiciones de convertirse en ley.
De lo contrario, se deberá constituir una Comisión Mixta para zanjar las diferencias entre los congresistas.
En la discusión de esta jornada, se rechazó la indicación de la Comisión de Hacienda del Senado, que establecía que la persona extranjera podría regular su situación migratoria hasta un plazo de 90 días de una vez publicada la ley.